FOTOGRAFÍA

El arte de la imagen que habla en silencio

Fotografías y textos de Javier De La Cuadra  – Facebook:   @JavierDeLaCuadra  – Instagram: @eljavidelacuadra

Fotografía de Javier De La Cuadra

Todo lo que botes al río te regresará por el cielo. Es la gran ley de todas las cosas.

 

Fotografía de Javier De La Cuadra

«Cuando la tierra esté enferma, los animales comenzarán a desaparecer. Cuando eso suceda, los guerreros del arcoíris vendrán a salvarlos”. – Jefe Seattle

Fotografía de Javier De La Cuadra

Les presento el Pie de Monte Amazónico. Ese lugar en donde la Amazonía se convierte en montaña para ser cordillera. Tanto poder y tanta vida custodiada por ese territorio. Anoche subíamos por la carretera que conecta Florencia con los Andes colombianos y este atardecer se desplegó ante nuestra mirada justo antes de que la niebla inundara las montañas con su mística caricia. No quiero que admires el paisaje, ni la magia del atardecer, ni mucho menos que pienses en la composición. Quisiera, más bien, que reflexionemos sobre el crítico estado en el que se encuentra la Amazonía por la indiferencia, el desconocimiento y la destrucción que nos ha propuesto un modelo de progreso egoísta. Hombres de negocios que explotan la naturaleza para nuestro consumo, lujo y poder. Pero quiero que al mirar esta imagen sepas que ese territorio está siendo custodiado por mujeres amazónicas que se entrelazan con ese territorio para liberarlo y liberarse del dolor y la violencia que las persigue. Quiero que veas en esas montañas a esas mujeres alegres tocando sus tambores de resistencia y amor por la vida al ritmo del corazón de la selva profunda y mística. Sembrando sabiduría y rescatando semillas. Mujeres que se conectan con un llamado secreto y poderoso que tiene el poder de transformar el mundo que habitamos. Desde hoy y por siempre Tierra Poderosa se siembra en lo profundo de la Amazonía.  

Fotografía de Javier De La Cuadra

Ayer la fotografiamos desde un avión. La totalidad de la que tú y yo llamamos la Sierra Nevada de Santa Marta y los picos más altos de la geografía Colombiana: El Colón (5.775 msnm) y el Bolívar (5.560msnm). Los picos nevados junto al mar más altos del mundo. Eso es lo que tú yo vemos: números, altura, turismo, nacionalismo, comparaciones, dimensiones, geografía, retos… Pero lo que tú y yo no podemos ver es lo que para el pueblo Arhuaco es U’munukunu*, que es en lo profundo el centro del pensamiento, que a su vez es el origen de todas las cosas, los guardianes del territorio, el centro de la organización territorial y espiritual de la vida. Te resumo: Lo que ves ahí es el origen de todo; nada más y nada menos.

Lo más lindo es cómo desde esta persepctiva, el pico que llamamos Simón Bolívar es un puro namtu (gorrito Kogui)

*Para cada uno de los 4 pueblos tiene un nombre y ciertas diferencias desde el pensamiento. Pero La Sierra es, para los 4 pueblos que la habitan, el centro del universo y sus dimensiones materiales y espirituales. El centro de la línea negra. (Perdonarán los hermanos mayores las imprecisiones, pero realmente sé muy poco) 

Fotografía de Javier De La Cuadra

Parece la portada de un disco de Pink Floyd, pero no. Son las ruinas de la mina de Palacio en el Parque Nacional Natural Chingaza en Colombia. La mina funcionaba a cielo abierto en el corazón del páramo. Desde 1920 y durante ochenta años Cementos Samper y luego CEMEX extrajeron del páramo miles de toneladas de piedra caliza que luego sería convertida en el cemento con el que se construyó la mayor parte de Bogotá en el siglo XX. En este mismo páramo nacen las aguas paramunas y cristalinas que proveen agua potable a más de la mitad de los habitantes de Bogotá. Las ruinas de la mina son un lugar desolado y muy contaminado por desechos mineros.

Cuando uno va caminando encuentra restos de piezas de hierro y otros metales enredadas en el musgo. El botadero de la mina, a donde arrojaron cientos de miles de toneladas de residuos mineros contaminó los arroyos y nacederos del agua más pura del planeta. Explotaron el páramo para construir Bogotá, luego, cuando el río Tunjuelo no dio abasto para surtir de agua a toda la población, comenzaron las obras para represar las aguas de Chingaza y construir el sistema de acueducto más importante de la ciudad. Tardarán miles de años para que en medio de estas ruinas el ecosistema pueda regenerarse y vuelva a tener las condiciones mágicas e idóneas para volver a dar a luz la vida y el agua más pura de nuestro planeta, el agua del páramo. Así fue cómo es posible que tu casa esté construida con un pedacito de páramo y que hoy bebas agua de ese mismo páramo. FIN

Fotografía de Javier De La Cuadra

Madre Tierra Semilla. Madre Tierra Amorosa. Madre Tierra Sensible. Madre Tierra Partera. Madre Tierra Transformadora. Madre Tierra Mística. Madre Tierra Poderosa.

Fotografía de Javier De La Cuadra

Una tierra libre en la que quepamos sin miedo a nuestros colores, a nuestras formas ni nuestras historias diversas. Una tierra libre de jerarquías políticas, económicas, intelectuales, espirituales o éticas. Una tierra diversa y libre como los huevos de las gallinas consentidas de Doña María. Una Tierra Poderosa…

Fotografía de Javier De La Cuadra

No, no son piedras preciosas. Son los fríjoles preciosos y de todos los colores con los que almorzamos hoy. Porque los alimentos y las semillas reales y libres tienen miles de formas olores y sabores. Cómo la gente real y libre.

Fotografía de Javier De La Cuadra

Un día más que se despide de esta Tierra Poderosa. Con sus colores, con sus dolores, con sus amores y desamores… un día menos un día más.

Fotografía de Javier De La Cuadra

Él es don Tulio Enrique Castro, ganador del primer premio de esquilador de oveja a tijera. Un oficio ancestral que requiere mucha habilidad y concentración para poder esquilar a la oveja en el menor tiempo posible y sin causare daño. La relación entre el esquilador y la oveja debe ser de mucha confianza. Esquilar es el principio de la fabricación de hilos para el arte del tejido en lana. Un oficio y un saber que se enfrenta a una posible desaparición por la industrialización desmedida de la confección de prendas de vestir y la explotación de la naturaleza y las personas en estos procesos, en donde el campesinado pasa de ser productor a un simple obrero.

Fotografía de Javier De La Cuadra

Así amanece hoy 26 de abril de 2022 la Sierra Nevada de Santa Marta, que pierde su glaciar a un ritmo cada vez más acelerado. Se descongelan los polos, el mar aumenta su nivel, sube la temperatura y el clima enloquece. Un planeta cada vez menos habitable para la especie humana. El lujo de depender de la energía eléctrica nos está cobrando cuentas.

Fotografía de Javier De La Cuadra

La Papita, ¿un amor romántico?

El tema del cultivo de papa es muy complicado. Los cultivos de mayor factura son terrenos en los que el propietario, sea de origen campesino o no, invierte millones en la preparación del terreno, siembra, agroquímicos y cosecha. Generalmente en estos cultivos trabajan por jornales decenas de campesinos. Los propietarios de los cultivos más rentables suelen ser campesinos que han ido sumando capital para invertir en la siembra de papa o que se endeudan con los bancos, o latifundistas que han comprado a campesinos sus tierras ancestrales. La papa es un cultivo en el que se usan grandes cantidades de agroquímicos, sobre todo para evitar la gota y que las chizas se coman las papas. Pero además se usan herbicidas como el Paraquat y el glifosato, que se ha comprobado que son altamente tóxicos en humanos. En algunos cultivos cosechan la papa verde, porque entre más madura esté a la hora de la recolección, más papa se pierde por el gusano y más tiempo entre siembra y venta.

La gente que tiene 40 años o más puede recordar cómo hace más de 20 años cuando se compraba papa en el líchigo estaba llena de tierra y había que lavarla en casa y quitarle las partes dañaditas. Hoy en día la mayoría de papa que se vende está lavada, es verde y sin gusanos. Esto es porque pasa por un proceso de lavado a presión en el que se usan enormes cantidades de agua cuyos residuos, entre otras cosas, terminan contaminando o afectando la calidad de las aguas y la tierra de las regiones. Cada vez más «Presentable» y menos «limpia».

En un cultivo que se vaya a pérdida, por ejemplo por un invierno duro o una sequía, el papicultor pierde toda la inversión, Pero en un cultivo exitoso de varias hectáreas el papicultor puede llegar a recibir cientos de millones de pesos por la cantidad de cargas recolectadas. En este proceso, los que menos dinero ganan son los jornaleros que trabajaron en el cultivo sembrando, fumigando y recolectando la papa. Los transportadores y las centrales de abastos también son muy beneficiados de la cosecha de la papa. Sobre todo en los supermercados de grandes superficies, que compran barato, empacan en bolsas plásticas contramarcadas y venden la papa a precios elevados. Casi nadie se da cuenta de que esa papa se ve limpia pero casi siempre está verde. La gente de la ciudad no sabe de papa; Ni siquiera saben diferenciar entre la papa pastusa y la sabanera.

Todo esto para suplir la casi infinita demanda del consumo de papa, del que entre otras cosas, se extraen toneladas de almidón para la fabricación de productos industriales como papel y pegamentos. Pero por ejemplo, en Colombia el almidón es importado de USA, porque los TLC favorecen la importación de materias primas e insumos.

La enorme diversidad de tipos de papa que hubo en américa latina, ha ido desapareciendo para fomentar la siembra de los tipos de papa con menos pérdida y que mejor respondan a los herbicidas y al uso industrial. Hay una visión romántica de la papa como símbolo del campesino agricultor. Pero realmente hay todo un entramado industrial y sistemático que convierte la papa en un símbolo de la explotación de la tierra, y desigualdad tanto entre productores como entre los campesinos, que en su mayoría se han convertido en obreros de un agronegocio más.

La papa es un símbolo de identidad y lucha campesina. Pero tratar de romantizar la relación de las ciudades con el campo evita entender a fondo las dinámicas de explotación tanto de la tierra como de los pueblos campesinos por parte de la economía y la presión del desarrollo, que empuja al campesino a convertirse en un asalariado o en un terrateniente que busca lucrarse con la tierra por encima de la producción sustentable de alimentos tanto para la gente de las ciudades, como para el mismo campesinado y la vitalidad del suelo.

Cada vez hay más comunidades campesinas en todos los países de américa latina que luchan por el rescate de semillas nativas de papa y por agriculturas sustentables, familiares y comunitarias, que produzcan tal vez mucha menos papa, pero más nutritiva, más limpia y más justa con la tierra y el agricultor. ¡pueblos que trabajan por un futuro con una papa más viva, nutritiva y deliciosa!

Fotografía de Javier De La Cuadra

Cándida es una mujer indígena Embera y vive en las selvas de Colombia. Ella misma fue su propia partera 11 veces. Cuando iba a tener el hijo número 12 fue al hospital para conocer cómo era dar a luz con la medicina occidental. Casi muere el niño y fue maltratada. Todos sus hijos viven y trabajan en la selva igual que ella. ¿Quién quiere decirme cuántos años cree que tiene la señora Cándida? ¡Hagan sus apuestas!

Fotografía de Javier De La Cuadra

Esta mañana salí a caminar a la montaña, tomé esta foto y no puedo dejar de pensar que vivimos en un mundo MISTICO ¿o no?

Fotografía de Javier De La Cuadra

¿ve ese punto blanco en la mitad de la montaña, en todo el centro de la foto, un poquito hacia arriba?
Hace unos días estuvimos en Pueblorico, en el Suroeste de Antioquia dando unos talleres de animación para niños y niñas. Al regreso alguien de la comunidad nos mostró esa montaña: -¿ve ese punto blanco de allá?- preguntó. Allá fue que el ejército masacró a 6 niños y niñas en el 2000. Iban de paseo escolar, vestidos de sudadera y camisetas. El ejército disparó media hora hacia ellos. No había forma de no saber que eran niños. Los quisieron pasar con guerrilleros del ELN pero en la zona no había presencia del ELN. En medio de las investigaciones los familiares de los niños y las niñas fueron amenazados. Algunos de los familiares tuvieron que huir del territorio. Ocurrió el 15 de agosto del año 2000. Hoy, 19 años después, el Consejo de Estado condenó al Ejército por la masacre. El Estado deberá reparar a 2 de las familias afectadas. Sí, 19 años después y a 2 de las familias… no hubo capturas, no hubo responsables, no hay nada más que nada… ¿Ve ese punto blanco allá en la mitad de la montaña? Recuerde muy bien ese punto blanco allá en la mitad de las hermosas montañas del Suroeste Antioqueño cuando le pegue a la cacerola esta noche; recuerde ese puntico blanco y dele, dele duro a esa olla, para que en la masacre de esos 18 niños en el Caquetá de hace pocos días no se repita la misma historia de impunidad y para que nunca más en la historia de este país vuelva a suceder que los niños sucumban en la guerra. Dele duro a esa cacerola. ¡Gracias!

Fotografía de Javier De La Cuadra

Veo las rocas en la madrugada y recuerdo que en ellas viven ancestros, espíritus del planeta. Gente milenaria, infinita y poderosa. Tantos espíritus de tierra, fuego, aire, agua, universo… Muchas gentes y dimensiones comparten nuestro espacio y nuestro tiempo. Pensamos solo en nosotros, queremos salvarnos, reparar el daño de nuestra especie. Una parte de lo que somos ha hecho daño pero la otra pide perdón, quiere no hacer más daño y seguir viviendo. Buscamos en nuestra propia razón la salida, la misma razón que aquí nos tiene compitiendo, en guerras de poder económico o intelectual. Sobran las razones, las tuyas y las mías. Ven, yo te invito a las rocas a que hagamos silencio un rato y escuchemos la tierra que pisamos. ¿Vienes?

Fotografía de Javier De La Cuadra

Creo que al final la vida está conformada por miles de hilos delgaditos que cuelgan del universo… nosotros sólo debemos tomar esos hilos y tejer entre todos la vida; Como esos telares hermosos que hacen en los Andes Americanos. Antes de nacer ya sabemos tejer… pero lo olvidamos durante los años y hacemos unos enredos de esos absurdamente incomprensibles… y luego el chicharrón pa soltar esos nudos… Bueno. Lo que quiero decir es que el universo es un eterno telar de sueños… Y bueno, acá tenemos las siempre todopoderosas rocas de Suesca esperando la luna llena consentidas por el atardecer… ¿Vamos a tejer?

Fotografía de Javier De La Cuadra

En nuestra sangre llevamos la herencia del indio pero también los genes del colonizador que torturó y violó a nuestras abuelas indigenas. Creo que tenemos la misión de recuperar el pensamiento ancestral de las selvas, pero también de reivindicar al ancestro colonizador con nuestras abuelas, con nuestra madre naturaleza. Al fin y al cabo, esa herencia colonizadora es la que tiene hoy el poder de seguir destruyendo nuestro planeta o detener la barbarie. Acá estamos resistiendo a nuestra propia sangre de colonizador y caminando las selvas en busca de la bendición del jaguar.

Fotografía de Javier De La Cuadra

Yo estaba lejos y la vi mirándose a los ojos con ese animal inmenso. Entonces me di cuenta de que se trataba de un dios antiguo y fue sublime ver como la miraba con tanta ternura. Les hice una foto para que me creyeran. Me acordé del gran Okoto, pero este era más grande todavía. Es que en el Amazonas hay dioses de todos los tamaños, pero bien es sabido que hay unos espíritus gigantes en las tierras sagradas más antiguas del mundo. Ese día me di cuenta de que ella tiene el precioso poder de hablar con los dioses mirándolos a los ojos.